La Gioconda es una obra pictórica de Leonardo da Vinci realizada, presumiblemente, entre 1503 y 1506. Es un óleo sobre tabla de álamo de 77 x 53 cm. Propiedad del estado francés desde el siglo XVI y que actualmente se exhibe en el Louvre.
He escogido este ejemplo para realizar mi cuarta entrada exigida y quinta en la cuenta general porque, si bien es cierto que es archiconocido, creo no por eso se debe dejar de lado, ya que es un claro ejemplo de cómo el arte se convierte en fuente de inspiración para la publicidad del siglo XXI.
En el spot de esta multinacional, cuyas hamburguesas podrían llamarse de otro modo, vemos cómo se recrea el momento en el que Leonardo se disponía a pintar el gesto de la modelo en su estudio. Y lo vemos irritado, porque la Mona no sonreía de ninguna de las maneras. Sin embargo, la modelo (deducimos que hambrienta) aprovecha un momento de ira del pintor para darle un bocado a una hamburguesa que escondía en una caja-libro (objeto que deducimos, también, debía ser muy frecuente en la época del cinquecento), es en este momento cuando le sonríe, disimulando, y vemos al maestro lleno de felicidad al haber consiguido el gesto que quería.
La ficción concluye con la Mona Lisa mirando a la cámara con gesto de complicidad y una imagen de lo que se anuncia, una hamburguesa. Finalmente aparece como conclusión Big Mac. Part of the Legend haciendo referencia al producto.
Por otro lado también es un ejemplo de inspiración el modo en que se caracteriza al actor que interpreta a da Vinci, seguramente inspiración extraída de los autorretratos del pintor.
No sé si a parte de dar este mensaje, se pretendía dar cierto aire de sofisticación, escogiendo este tema y esta obra para el anuncio. Si es así debo decir que por lo que he oído las hamburguesas saben como siempre.
Scaramuccia
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